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Reinformando: "Viajes a las islas"
From: Francisco Cayol <fcayol@topmail.com.ar>
Date: 09 Jul 1999 15:07:28 -0500
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LA NACION LINE | 09.07.99 | Politica
Negociaciones por las Malvinas
Acuerdo para viajar a las islasBuenos Aires y Londres redactaron un borrador que autoriza el ingreso de los argentinos en el archipiélago.
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Pedido de Menem
Los ciudadanos argentinos podrán visitar las islas Malvinas antes de fin de año, a bordo de aviones que, en principio, no despegarán desde la Argentina continental pero sí harán una escala en el país. Así lo acordaron los gobiernos de la Argentina y Gran Bretaña, al dejar en claro sus voluntades de avanzar en la relación bilateral y regresar a la situación previa a la guerra de 1982.
El entendimiento quedó plasmado en un borrador que se terminó de acordar anteayer entre funcionarios de ambos gobiernos. El texto fue revelado a La Nación por una fuente del Gobierno, que dijo haber tenido un papel protagónico en su redacción, y por dos integrantes de la delegación que viajará, pasado mañana, a Londres.Allí, el canciller Guido Di Tella volverá a reunirse el martes próximo con su par británico, Robin Cook, que anteanoche solicitó el encuentro. "Habrá genuinas negociaciones y esperamos que también haya un anuncio ese día", dijo ayer la vocera del Foreign Office, al aludir a la cita.
Di Tella se entrevistará con Cook por cuarta vez en menos de 50 días: lo hizo a fines de mayo último en Londres y, luego, la semana última, en Río de Janeiro y en Nueva York, también por solicitud del funcionario británico.
Aval opositorEsta vez, el canciller argentino no pisará suelo inglés solo. Además de la compañía del vicecanciller Andrés Cisneros, lo acompañarán los diputados Fernando Maurette (PJ-Capital), titular de la Comisión de Relaciones Exteriores; Marcelo Stubrin (UCR-Capital), Carlos Raimundi (Frepaso-Buenos Aires) y Marta Aráoz (PJ-Córdoba).
Todos ellos fueron invitados por Di Tella, quien, confiaron varios de ellos a La Nación, les prometió que regresarán del Reino Unido "con éxitos" bajo sus brazos.
Ese éxito, a juicio de los funcionarios de la Casa Rosada, el Palacio San Martín y los legisladores, sólo podría traducirse en la práctica en la reanudación de las visitas de argentinos a las islas y el restablecimiento de los vuelos entre la Argentina continental y el territorio insular.
En verdad, ambas cuestiones casi quedaron resueltas en mayo último, cuando las delegaciones de la Argentina y el Reino Unido mantuvieron una serie de reuniones muy cerca del Palacio de Buckingham. Allí, destacaron la voluntad compartida de que la relación entre argentinos, británicos y malvinenses adquiera las mismas características que tuvo antes de la guerra del Atlántico Sur.
Pero el optimismo privado de Di Tella, en público, se convirtió ayer sólo en expresiones cautas. El canciller pretendía que su futura cita con Cook no trascendiera públicamente. Pero la euforia, que envolvió al presidente Carlos Menem y a varios de sus ministros apenas conocieron por boca del canciller la noticia, aguó sus planes.
Fue el ministro de Defensa, Jorge Domínguez, quien divulgó la reunión. "Se avanzó sensiblemente en los objetivos que sigue el Gobierno", informó.
"No es responsable inflar expectativas a destiempo", estimó, por su parte, Di Tella, en un intento por bajar al mínimo posible el optimismo oficial. Eso ocurrió aun cuando Menem invitó a brindar con champagne "por el nuevo logro del canciller", en medio de los festejos por los diez años de su gestión, en Olivos, al elenco ministerial, embriagado por una euforia que Di Tella intentó ocultar.
Ese estado no fue exclusivo del Gobierno: "Es imposible ocultar que es un paso adelante, ya que no iremos a Londres por un gesto desesperado de Di Tella, sino por un pedido formal de Cook, lo que hace suponer que el resultado será satisfactorio", evaluó el diputado Raimundi a La Nación.
"Si lo que espera el Gobierno se concreta, será un avance. Viajo para mantener informado a mi partido", expresó, por su parte, el radical Stubrin.
Desde las islas llegarán a Londres los consejeros Sharon Halford y Mike Summers, flexibles a reanudar los contactos con el continente. "Creemos haber hecho muy buenos avances", dijo Halford a la agencia de noticias Mercopress. Ayer, en un comunicado, los consejeros isleños afirmaron que "la estrategia es conseguir lo mejor para el futuro de las islas", luego de que se conociera que seis de los ocho miembros del Consejo Legislativo se expresaron en favor de que los argentinos visiten el archipiélago.
Tres puntosEl documento acordado tiene tres puntos: el ingreso de los argentinos a las Malvinas sin necesidad de presentar un pasaporte de una segunda nacionalidad, la decisión de instrumentar una política de cielos abiertos y sin discriminación, y el compromiso de encarar acciones conjuntas para combatir la pesca ilegal en cercanías de las islas.
El primero y el segundo asunto están estrechamente vinculados entre sí. ¿Cómo podrán llegar los argentinos a las islas si los aviones que se dirigen hacia allí no despegan o hacen escala en la Argentina continental?
La respuesta ya fue debatida entre ambos cancilleres. Según pudo saber La Nación, los negociadores de ambos países evalúan la posibilidad de que los primeros vuelos hacia Puerto Argentino despeguen desde Punta Arenas, como ocurría antes del 27 de marzo último, cuando la empresa LanChile y el gobierno trasandino decidieron la cancelación de esa ruta.
"Quizás, en los primeros días de octubre se habilite además un recorrido entre Río Gallegos y las islas, aunque es una cuestión comercial", admitió un legislador que viajará a Londres, tras dialogar con Di Tella. "Lo que se descarta es que el vuelo desde Chile hará una escala aquí, y a ello se apunta", agregó la fuente.
"El documento todavía no está cerrado, ya que hoy está pendiente de acuerdo formal", advirtió Maurette a La Nación. En su opinión, "el avance en las negociaciones es fruto de la firmeza de los países del Mercosur", que no autorizaron vuelos a las islas desde sus territorios que no hagan escalas en la Argentina continental.
El anhelo de los diputados es además que se incluya en el documento un homenaje a los caídos en la guerra de 1982: en la práctica, sería la construcción de un monumento en las islas a los combatientes argentinos o que flamee una bandera celeste y blanca en el cementerio de Darwin.
Andrea CentenoCopyright © 1999 La Nación | Todos los derechos reservados
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